El pasado 30 de abril de 2022 tuvo lugar el Día Mundial de la Veterinaria, un día en el que profesionales veterinarios, defienden su trabajo y el bien que hacen en la sociedad de hoy en día.
03.05.2022. El pasado 30 de abril de 2022, se celebró el Día Mundial de los Veterinarios, como cada último sábado de abril de cada año, fecha clave para dar visibilidad e importancia a los veterinarios, y a su contribución a la salud de los animales, las personas y el medio ambiente. Este año y bajo el lema “One Health-Una Salud”, la Organización Colegial de Veterinarios (OCV), promocionó un vídeo donde veterinarios de todo el mundo, en concreto veterinarios de Portugal, Italia, España, El Salvador, Irlanda, Holanda, Rumania, Polonia y Austria, se unían para visibilizar la profesión desde una sola visión de salud abarcando a las personas, animales y medio ambiente.
En el vídeo recalcaron que “Conocer que el origen de muchas enfermedades puede estar en los animales e invertir en prevención es el primer paso para proteger la salud de las personas, de los propios animales y salvaguardar el medio ambiente”. Además, los veterinarios mencionan que “Dos de cada tres enfermedades en humanos son compartidas con los animales, motivo por el cual el veterinario es un actor esencial en la estrategia One Health, ya que entre la salud de animales, personas y medio ambiente no hay líneas divisorias”.
Gracias al progreso de la investigación veterinaria, se pueden diagnosticar y tratar enfermedades y dolencias de los animales, muchas de las cuales afectan a las personas. La Sanidad Animal es fundamental en la sociedad de hoy en día, tanto en animales de compañía, de producción, ocio y deporte e incluso los animales silvestres, para garantizar su adecuado estado de salud y bienestar. A su vez, la sanidad animal es clave para la correcta alimentación en animales, la cual es importante para que tengan una buena calidad de vida, tanto en animales de compañía como animales de granja, ya que de esta última depende la actividad comercial para la satisfacción de las necesidades alimentarias de la población humana.
En este contexto, merece ser destacada la contribución del desarrollo de medicamentos como los antibióticos o las vacunas o de herramientas de diagnóstico que han permitido prevenir, controlar y erradicar, en la medida de lo posible, enfermedades zoonóticas y no contagiosas de animales a humanos.
Además de todo esto, la sanidad animal ayuda a preservar el medio ambiente. Según datos de la OIE, las enfermedades serían responsables del 20% de las pérdidas de la producción animal. Por tanto, de no controlarse, ello conllevaría que, para producir la misma cantidad de alimentos, se necesitaría muchos más animales. Ello implicaría una mayor utilización de recursos naturales (terreno para producir materias primas, agua, etc.) y una mayor cantidad de residuos orgánicos que gestionar.
